Comentó que aprendió a faenar reses en su adolescencia en la carnicería de sus padres, ubicada en los años 80 sobre Acuña de Figueroa (Avenida 5ta) y la calle Alberdi, de Asunción, luego emprendió vendiendo combos de carnes.

La carrera que abrazó Leyzman lo llevó a lugares impensados como el Campeonato Mundial del Asado en Bélgica donde, como integrante del equipo Barbakuá de Paraguay, compuesto por siete maestros asadores, obtuvo el puesto número 11 a nivel mundial y el primero en Latinoamérica. En esa edición 2022, Dinamarca, Austria y Bélgica fueron las tres mejores. 

En efecto, Leyzman es el capitán del equipo Barbakua de Paraguay, que está integrado además por André Magon, José Torrijos, Frank Schmidt, Federico Quesada, Richard Gini Kent y Jimmy Benítez clasificó en el undécimo lugar en el Campeonato Mundial del Asado y se posicionó como el número uno en Latinoamérica.

Manifestó que comenzaron haciendo chorizos artesanales para proveer a los supermercados, aunque sin mucho éxito debido a la falta de experiencia, entre otras cuestiones, por lo que pasaron al rubro de servicio de catering. “Hoy por hoy, nosotros usamos nuestros propios embutidos. Tenemos ahora el parque de servicio de parrillas más grande del país, para unas 25.000 personas, y son todas parrillas diseñadas y hechas por nosotros de acuerdo con las necesidades paraguayas”, reveló.

Leyzman indicó que sus dos abuelos eran carniceros, al igual que su padre, mi papá, más que carnicero, se dedicaba a la compraventa de haciendas para frigoríficos, hecho por el cual arrancó su primera travesía dentro del mundo de la carne. 

Comentó que su paso por Estados Unidos le ayudó a ver con otros ojos el mundo del negocio. Indicó, que su primera envasadora era de hierro fundido como una mesa de comer grande. “Había comprado como hierro fundido de un frigorífico. Sobre esa mesa hacíamos cortes de colita cuadril, costilla de cerdo, otras carnes y chorizo, para preparar paquetes para 10 personas de unos 5 kilogramos. Así arrancamos”, contó, bastante emocionado.

En la actualidad, la empresa de Salim, emplea de forma directa a 10 personas. Además, cuenta con ambiciosos proyectos como la elaboración de sales para carnes y diferentes modelos de cuchillos. Junto a su esposa, quien trabaja muy de cerca con todo lo que hace, no solo realiza servicios en Paraguay, sino también en el extranjero. Tiene en su portafolios trabajos en México, Costa Rica y Argentina.

Por otra parte, comentó que los días 11 y 12 de noviembre del 2024, Salim estará en Costa Rica, donde dictará unos cursos primero, para luego participar de una competencia de nivel mundial con el equipo BarbaKua, que irá del 17 al 19 de noviembre, similar al mundial de Bélgica. Dicha competencia será intercontinental, ya que disputarán el premio mayor los 25 mejores equipos de Europa y de América Latina y 10 equipos locales.

Por último, Salim expresó que, en el Congreso de Costa Rica, propondrá la postulación de Paraguay para que se convierta en sede del mundial de asado del 2026, encuentro al que asisten 1.000 personas de manera directa, considerando que van 80 equipos con 15 a 20 personas cada uno.

En el 2024, el maestro asador paraguaya tiene ya compromisos asumidos: en febrero estará en la Patagonia de Chile; en julio, junto a Barbacuá, en el Mundial en Alemania (la cita más delicada); en setiembre irá a un encuentro de carácter mundial de parrilla abierta en Uruguay, que involucra a la Asociación Paraguaya de Criadores. “Vamos a estar con carne y bandera paraguayas”, aseguró.