Ante la nueva normativa adoptada, los países de la Unión Europea (UE) pueden otorgar préstamos y subsidios a empresas que sufren el impacto de las sanciones y el aumento de los precios del gas, bajo ciertas condiciones.

En un comunicado, la comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, afirmó que las sanciones adoptadas por la UE tienen un fuerte impacto en la economía de Rusia pero también “pesadas consecuencias para la economía europea, y lo seguirá teniendo en los próximos meses”.

“Debemos mitigar las consecuencias económicas de esta guerra y apoyar a las empresas y sectores más afectados, y actuar de manera coordinada”, apuntó la funcionaria.

En este cuadro, los países del bloque podrán conceder cantidades limitadas de ayuda a las empresas afectadas por la crisis actual o por las sanciones y contra sanciones relacionadas, incluyendo préstamos subsidiados y la concesión de garantías estatales.

Podrán también velar porque las empresas dispongan de suficiente liquidez y compensar a las empresas por los costos adicionales incurridos debido a los precios excepcionalmente altos del gas y la electricidad.