Una receta infalible para captar clientela es poco menos que una utopía y, en el caso de existir, nunca serviría para todos, puesto que a menudo lo que a unos les funciona, a otros no. Son muchos los elementos en juego.

Sin embargo, el perfeccionamiento de las estrategias de marketing digital está consiguiendo que la tarea deje de ser tan quimérica para resultar un poco más cercana.  

La teoría del embudo es una de las bases del marketing. Concretamente, se fundamenta en que, de la totalidad de usuarios que navegan en Internet, únicamente tres cuartas partes están buscando información, por lo que son susceptibles de llegar a nuestro negocio. 

De ese segmento del público total se extrae que, aproximadamente, un 23% están dispuestos a comparar, es decir, que van a incluir nuestra propuesta entre las opciones plausibles de compra que barajan. 

Una vez superado este paso, solo 2 de cada 100 estarán preparados para llevar a cabo la adquisición del producto o servicio. De esta última cifra saldrá el número de clientes final de nuestro negocio.

Como bien señalábamos en este epígrafe, se trata de una teoría y como tal sirve de guía, porque la realidad del mundo digital en el que vivimos nos dice que cualquier usuario puede acceder a la parte final del embudo, la que de verdad nos interesa a nosotros, sin pasar necesariamente por las otras dos fases previas.

Partiendo, por tanto, de la citada teoría han de desarrollarse las estrategias de marketing adecuadas. Dado que, en su inmensa mayoría, los usuarios de internet acceden a este medio en busca de información, lo ideal es generar una táctica de creación de contenidos que les aporte valor y utilidad. 

Esto también sirve para subir escalafones en los resultados de búsqueda de Google, lo que incrementará nuestra visibilidad y, con ella, las posibilidades de vender más.

Aprovechar todos los canales posibles es básico para alcanzar el éxito. Redes sociales, blogs, correos electrónicos o realizar algún webinar son solo algunos buenos ejemplos y, además, al alcance de cualquier bolsillo. 

Al fin y al cabo, la información es poder y, en el entorno digital y cuando se trata de captar clientes, aún más. La información será un paso previo ineludible para la personalización del producto, otra de las bazas más en boga en los últimos tiempos.

Sabes que no a todo el mundo le interesan tus productos o servicios, motivo por el que debes esforzarte en dirigirte a quienes sí y conocerlos a fondo, entendiendo sus problemas y necesidades y tratando de resolvérselos. 

Ser proactivo y útil, y no un mero vendedor, hará que, además de comprar en tu negocio, depositen en tu negocio su confianza. Y, eso, que no es otra cosa que un cliente satisfecho y fidelizado, no tiene precio porque te garantiza sucesivas ventas y el “boca a boca”, todavía hoy una de las publicidades más potentes y efectivas.

Responsable en España de la compañía global experta en marketing de contenidos Textbroker.es. Experto en ecommerce y marketing online cuenta con colaboraciones puntuales como experto en portales como Amazon afiliados España o El Mundo. Enamorado del Networking y la comunicación social da rienda suelta a su personalidad extrovertida en su bitácora www.Blogtimista.es . Escribe en MUNDIARIO.