García extendió sus “felicitaciones a todos los paraguayos por los avances” en infraestructura, comparado con hace un par de décadas. Destacó que ha sido una gran transformación del país con obras simbólicas que son íconos de Paraguay como la carretera Transchaco, el servicio de Agua Potable y Alcantarillado, las carreteras Encarnación-Posadas, Campaña de Lucha contra la Fiebre Aftosa, entre otros proyectos que han sido implementados con financiamiento de la CAF y con los cuales el Ejecutivo ha sido coordinador y director. 

En el contexto latinoamericano, García manifestó que la mayoría de los países de la región “está llevando adelante políticas macroeconómicas muy adecuadas y apropiadas con las circunstancias, obviamente, el caso de Paraguay no es la excepción y es un manejo muy prudente y serio. Esto es buena noticia”.

Otro escenario positivo destacado por el Presidente Ejecutivo de la CAF es que gracias al crecimiento económico alcanzado durante varios años (superior a 4,5% y 5%), en promedio superior al que se tuvo en años anteriores, “América Latina logró incorporar a ciudadanos y familias al núcleo que podría denominarse clase media y cambió también su composición de ser una región más rural a ser una región más urbana con menos, pobres, menos indigencias, más gente en la clase media, la cual es una muy buena noticia”. 

Como mala noticia, García señaló que la región fue complaciente en no haber llevado adelante con suficiente ímpetu reformas estructurales que tengan unas características de dar una permanencia en el tiempo y al mismo tiempo transformar la estructura misma de las economías para que sean sostenibles y para que tengan una convergencia con las economías de los países más industrializados, desaprovechando así la bonanza que tuvo América Latina en cuestiones de una estabilidad macroeconómica y una liquidez internacional que permitió un acceso mucho más fácil a los recursos financieros internacionales de los mercados.

El titular Ejecutivo de la CAF sostiene que si bien Paraguay está con crecimiento superior a 3%, y por encima de los pronósticos para varios países de la región, “eso no es suficiente para lograr los objetivos de sostenibilidad de largo plazo”, e insta a fortalecer la inversión en Infraestructura, Educación, Innovación y Emprendedurismo. La sugerencia de García es aumentar del 3% de inversión en educación, que es el promedio actualmente invertido en América Latina a 6% del PIB.