La Cámara Paraguaya de la Industria de la Construcción (CAPACO) emitió un comunicado en el que señala que el retraso en el pago por las obras públicas y la inacción de parte del Banco Central del Paraguay (BCP) está generando un perjuicio en las empresas constructoras, por la pérdida de su calificación ante el sistema financiero.

El documento divulgado por el gremio de la construcción señala que el atraso de la deuda del Estado con las empresas por más de 400 millones de dólares, generada el año pasado, provocó que varias compañías estén a punto de ser devaluadas en su calificación por el sistema financiero, atendiendo al atraso que afectó a toda la cadena de pagos a proveedores de la construcción y a los mismos bancos.

Tanto la Cámara Paraguaya de la Industria de la Construcción (CAPACO), como la Cámara Vial Paraguaya (CAVIALPA) recordaron que se han enviado sucesivas notas al Banco Central del Paraguay (BCP) en las cuales se solicitaron medidas transitorias, similares a las que se adoptaron al inicio del año pasado a los productores del agro, tras la sequía, permitiendo que pueda evitarse la devaluación en sus calificaciones ante los bancos y que sea posible que sigan siendo sujetos de crédito.

Los gremios de la construcción mantuvieron en diciembre pasado una reunión con el presidente del BCP y con los miembros del directorio de la banca matriz al respecto y quedaron a la expectativa de una resolución del ente emisor, que hasta ahora no se ha pronunciado.

A medida que pasan las semanas los gremios lamentan la falta de respuesta de parte del BCP, ante el pedido de medida de auxilio, que sí fue otorgada a los gremios del agro, cuando estos la requirieron.

Los presidentes de CAPACO, Ing. Daniel Díaz de Vivar y de CAVIALPA, Ing. Paul Sarubbi coincidieron en señalar que la causa del problema es atribuible al atraso del Estado en el pago de sus deudas y que los efectos negativos de esta situación podrían atenuarse con una medida que permitiría a muchas empresas seguir siendo sujeto de crédito.

Si bien a finales del año pasado y a principios de este año se había abonado parte de la deuda, persiste un saldo de alrededor de 300 millones de dólares. No obstante, para tener certeza sobre los montos aún adeudados, se solicitó formalmente al Ministerio de Obras Públicas (MOPC) el detalle de la deuda.

Actualmente, el sector de la construcción representa el 8% del producto interno bruto (PIB) y emplea en forma directa a unos 300.000 trabajadores aproximadamente.