El BID financiará a empresas que quieran pasar de Asia a América Latina

Publicado en fecha 29-12-2021
El estadounidense Mauricio Claver-Carone llegó a la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) el 1 de octubre del 2020 con un objetivo: evitar que América Latina pasara por otra “década perdida”. Su estrategia para ello ha sido impulsar la colaboración del BID, que es la mayor agencia de desarrollo en la región, con el sector privado, reveló el funcionario en entrevista con el diario El Mundo.

Eso implica atraer inversión, lo que incluye el nearshoring, es decir, la relocalización de empresas y líneas de suministros actualmente situados en Asia más cerca de sus mercados de destino.

Es una idea que, visto el actual repunte de la inflación en el mundo, cobra más actualidad. Como afirma Claver-Carone, que estuvo en España tras la COP26, “el atasco de las cadenas de suministros que estamos viendo hoy es consecuencia precisamente de la sobreinversión del mundo en China”, dijo.

A día de hoy, el BID es, junto con el Gobierno de Japón, la única organización del mundo que financia ese tipo de nearshoring.

El funcionario agregó que el nearshoring no es anti-China, sino pro-América Latina.

“Es algo que he presentado a las empresas españolas. Pero no estoy hablando de nearshoring pensando sólo en Estados Unidos sino, también en España. Si hay empresas españolas que hayan invertido su cadena de valor en China o en otros países asiáticos y quieren trasladar esa cadena a América Latina, el BID se lo financia. Yo creo que los europeos están empezando a verlo como una oportunidad”.

Sobre si el banco financiaría la totalidad de la mudanza o sólo una parte, el funcionario explicó que el BID estructuraría un paquete integral de financiamiento basado en las necesidades de la empresa. Puede ser el traslado, las operaciones u otra modalidad.

El BID ya está diseñando el primer Policy-Based Loans, de apoyo a los gobiernos de nearshoring con Colombia. Porque hay países que han visto los beneficios y están desarrollando y lanzando estrategias, como Guatemala, República Dominicana, Colombia, Panamá, y, hasta cierto punto Costa Rica y Uruguay. Aunque, obviamente el país que más se podría beneficiar sería México, apuntó.

Japón lanzó su iniciativa con una dotación de 1.000 millones de dólares e hizo dos paquetes. Uno, para las empresas japonesas con manufactura en el exterior y que querían trasladarlas a Japón, a las que daba un paquete muy atractivo.

Otro, para las que se relocalizaran en países de la ASEAN (el pacto económico formado por ocho países asiáticos entre los que no están China ni Japón) que reciben una cuantía inferior.

De acuerdo con el funcionario, sí hay peligro de que ésta sea una década de oportunidades perdidas.

“La mayor parte de la mejoría del crecimiento que estamos viendo es por el incremento de los precios de las materias primas. Pero eso ya sucedió en el pasado. Y ¿qué se hizo entonces con ese dinero? En gran parte, se desperdició en programas electorales y populistas”, dijo en entrevista con el diario español.