BM reduce previsión del PIB en América Latina de 1,7 a 0,6%

Publicado en fecha 08-10-2018
América Latina no cumplirá este año con las expectativas iniciales de crecimiento debido a los importantes retos que enfrentan las mayores economías del sur: Brasil y Argentina. Además, tendrá que cargar de nuevo con el deterioro pronunciado en que se mantiene Venezuela, advirtió el Banco Mundial (BM).

El organismo redujo drásticamente su previsión de crecimiento para la región hasta 0,6% en el 2018, desde 1,7% que tenía en abril, diagnosticando una recesión para Sudamérica de 0.1 por ciento.

Desde Washington, previo al inicio de las Reuniones Anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial en Bali, Indonesia, el Banco anticipa que la expansión regional para el año entrante, esto es de toda América Latina, será de 1,6%, una tasa también recortada desde 2,3% anterior.

En el Informe Semestral del economista en jefe para América Latina, Carlos Vegh, precisan que sólo Brasil, que es la mayor economía del conjunto al aportar un tercio del Producto Interno Bruto (PIB) regional, tendrá un desempeño inferior al pronosticado por el organismo en abril.

Todavía en abril, el BM anticipaba un crecimiento de 2,4% para Brasil este año, tasa que recortó a la mitad para dejarla en 1,2% en su versión actualizada.

Expertos del organismo consignaron que el impacto de la incertidumbre política sobre las inversiones ha limitado a Brasil la capacidad de crecer y aspirar a un mejor desempeño para el 2018.

Para el año entrante, anticipa una expansión de 2,2% al PIB de la primera economía de la región, desde la tasa previa de 2,5 por ciento.

Argentina, el deterioro anticipado
El organismo prevé que Argentina se contraerá a una tasa de 2,5% este año; y que el próximo año la caída se moderará a 1,6 por ciento.

Sus esfuerzos para transformar su economía mientras confrontaba el desafío de lidiar con desbalances macroeconómicos y mitigar costos sociales de su transición “tomaron un giro inesperado cuando el 8 de mayo anunció que solicitaría un considerable apoyo financiero al FMI para el pago de sus obligaciones externas durante los próximos tres años”.

Los expertos del BM destacaron que las economías regionales se encuentran particularmente expuestas a choques externos. Como ha sido la conducción de la política monetaria de Estados Unidos, que desde el 2010 propició un flujo de capitales vía mercado y que en el retorno está propiciando salidas de recursos que han debilitado a las monedas.

El Banco Mundial estima una caída neta de capitales a la región, de un máximo de 49.600 millones de dólares en enero del 2018 a 18.800 millones en agosto.

Las economías más impactadas de esta volatilidad han sido las que cuentan con importantes debilidades en sus cuentas fiscales y vulnerabilidades financieras.

Venezuela, en caída libre
De acuerdo con el pronóstico del economista del BM, Venezuela profundiza este año la contracción en que se ha mantenido desde el 2015 al alcanzar un PIB negativo en 18,2 por ciento.

Para el año entrante, la caída se matizará pero seguirá libre, documentando una nueva contracción de 8,4 por ciento.

“La situación en Venezuela continúa agravándose con una crisis económica, financiera y social sin precedentes en la historia contemporánea de la región”.

Calcula que “la caída acumulada en la actividad económica venezolana es de más de 50% durante los últimos cinco años”.

Panorama heterogéneo
Vegh explica que existe un alto grado de heterogeneidad en las subregiones de América.

Así, anticipa para las economías de Centroamérica registrarán una expansión de 2,8%, frente a 3,7% del 2017.

Esto en gran medida debido a  la crisis política y económica que atraviesan países como Nicaragua y Guatemala, para quienes no precisa un pronóstico puntual del crecimiento.

Para el Caribe prevé una expansión de 3,7%, sin duda la más dinámica del grupo, y México que logra sostener una tasa de 2,3% para este y el año entrante que, sin embargo, no logra hacer contrapeso al deterioro de Sudamérica.

El informe de Carlos Vegh fue divulgado con anticipación a las Reuniones Anuales a las que asisten los 189 miembros del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, que por primera vez se realizarán en Bali, una de las islas más grandes de Indonesia.