Maduro inicia nueva política de inversión extranjera para sacar al país de la miseria

Publicado en fecha 29-03-2017
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, firmó un nuevo decreto en el marco de la Emergencia Económica para iniciar una nueva política de inversión extranjera en Venezuela para el desarrollo de los 15 motores de la Agenda Económica Bolivariana.

Durante la clausura de la Expo Potencia Venezuela, el mandatario indicó que la medida busca captar capital de inversionistas en todos los campos de desarrollo económico.

El vicepresidente Ejecutivo, Tareck El Aissami, explicó que el objetivo es fomentar las inversiones extranjeras directas. Afirmó que con el nuevo marco legal se ofrece seguridad jurídica para el capital. "Quien quiera venir a invertir en Venezuela, en el marco de la constitución, tiene todos sus derechos garantizados y además la protección integral de la inversión internacional directa", dijo.

El presidente Nicolás Maduro señaló que se presentarán un nuevo Plan de Crecimiento Económico 2017-2018.

En ese sentido, pidió al Vicepresidente Ejecutivo realizar la última consulta en el marco del Consejo Nacional de Economía para dar a conocer este nuevo plan que contiene aspectos relacionados con la inversión y las políticas sectoriales que estimulen un crecimiento económico sano.

Empujón “en segunda” a la industria automotriz
En el marco de la clausura, Maduro suscribió con representantes de cada una de las armadoras privadas del país, convenios que comprenden el fortalecimiento de producción de carros particulares, vehículos de carga y motos productivas.

Según dijo, este compromiso permitirá generar 90,000 nuevos puestos de trabajo en la industria automotriz venezolana, pero no ofreció detalles de cómo funcionará la asistencia crediticia.

El sector acusa la recesión económica y ni la venta en dólares de vehículos armados en suelo venezolano (autorizado a Ford Motors en marzo del 2015) pero con piezas compradas en el exterior, ha ayudado a recuperar ese parque industrial que funciona a 1% de su capacidad.

En los últimos tres años las cifras del sector han sido las peores de la historia de las armadoras. Algunas empresas tienen un año sin armar un solo vehículo, por lo que han tenido que enviar a sus trabajadores a casa gozando de beneficios mínimos.

La producción ha sido intermitente en todos los casos y en el 2016 —según datos de la Cámara Automotriz de Venezuela— sólo 2,849 unidades salieron de las cinco plantas —de siete— que pudieron fabricar vehículos.

En los meses de enero y febrero del 2017 sólo se produjeron 240 unidades.